Hola a todos los que se pasaràn por aquì a visitarme!
Era un 4 Octubre, lluviesilla fina, niblina bastante tupida, mis suegros con
caras de limòn porque la noche antes se comportaron con mis hijos bien
"sarnitas" (que Dios los tenga en Su Gloria) Pero con todo y todo, se
vè la felicidad que me desbordava del corazòn.
Ese dìa ya yo estaba casada con mi marido civilmente, pero la felicidad
consistìa en el saber que me irìa a casar con mi Senor Jesùs!
Tuve que esperar 15 largos años para poder finalmente recivir de nuevo a mi
Jesùs en la Santa Eucaristìa!! En las fotos se ve don Cornelio...il mio caro
don Cornelio...cuanta falta que me hace!! Me commociona ver las fotos.
Y mi marido...còmo èra jòven y bello (para mì, naturalmente)
Còmo eran oscuros, naturales, brillantes y tupidos mis cabellos! Mi hijita
fuè la que me peinò a su tierna edad de adolecencia...què amor!
Las fotos las sacaron mis hijos, a turno se la prestaban, hicieron varias,
pèro èstas son las màs significativas del matrimonio en sì...
El dìa de San Francisco de Assìs...no es una casualidad. Habìamos ido un par
de años atràs a visitar la ciudad natal de èste santo que tanto amo y ahì mismo
le pedì que me hiciera la gracia! Y si el dìa cayò en su fiesta es porque entre
a tantos santos a los que se los pedì, de seguro a èl mi Dios se la concediò.
Hoy fuimos a festejarlo en modo simple, toda la familia.
Porque èste aniversario es de la familia. Lo vieron mis hijos que
fueron los ùnicos que despuès de la boda me estuvieron cerca y que
conmigo conversaban, porque los demàs o me tenìan la carota o no los
conocìa bien, porque èran amigos de mi marido.
Las personas que conocìa yo, eran las chicas de la Caritas de Vigonza,
ùnicas a las que podìa reconocer como a "familia" en aquella època, y que
llevo en mi corazòn en manera especial. EL papà de una de ellas era el "perpetuo"
que cantaba en la iglesia, y estaban sentadas atràs, hicieron el coro de mi
matrimonio y puedo asegurar que los àngeles cantaban con ellas, tanto
hermosas recuerdo las voces y tanto grata me sentìa.
Fuè el dìa màs bello en muchos años pero al mismo tiempo el
màs amargo, pues el maligno se asegurò de hacer de todo para que
hubiera del amargo en èsta celebraciòn.
Pero por la tarde, el sol saliò y saliò tambièn en mi corazòn hasta hoy.
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