Buenos dìas amigas.
Hace unas semanas ya que muriò mi suegra, despuès de
una agonìa muy sufrida.
Tuvimos màs de dos semanas visitandola y asistiendo a
su sufrimiento, sintiendonos impotentes y unicamente orando y
rezando, pidiendo a Dios piedad y Misericordia por su alma.
Bendigo el Senor porque aunque èsto pueda parecer anormal,
se la llevò en el mes de Mayo.
Ella no que fuera particularmente devota de la Virgencita Maria,
pero en algunos momentos de su vida manifestò su creencia
y fe en ella. Muriò propio el 26 Mayo.
Mi dolor màs grande fuè el de ver sufrir a mi marido y a mi
cunada. El funeral se efectuò en Vigonza, donde fuè enterrada
junto a mi suegrito Silvio.
El unico alivio en èsta triste situaciòn es saber que sus sufrimientos
en èsta tierra terminaron.
